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Las parejas (realmente) felices publican menos o nada de su relación en las redes sociales

La ciencia lo confirma: el amor se vive, no se comparte. Aquí te decimos por qué no compartir información personal y de tu pareja en redes sociales. ¿Por qué hay gente que sí lo hace y otras que no.?
Por: Redacción | criticadn.mx

Bueno, el primer motivo por lo que no debes de publicar tu relación de pareja en las redes sociales es porque terceras personas pueden utilizar nuestra información con fines comerciales o puedes poner en peligro a tu pareja, familia o amigos cercanos, pero algo que es muy importante es que nuestra privacidad deja de tener sentido y así perdemos la autoridad sobre nuestra información confidencial.

¿Simulación?

Debemos de estar conscientes que entre los diferentes amigos que encontramos en la red siempre hay algún perfil spamer (son personas o empresas que se dedican a enviar información considerada como spam) y que son individuos, hombres o mujeres que no dejan de compartir lo enamorado que está de su pareja o lo que están haciendo en todo momento. De las fotos de aniversario a los posts porque sí, estos individuos exhiben su felicidad a diario. Sin embargo, la ciencia cuestiona dicha actitud y revela justamente lo contrario.

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Casi como ocurre con la frecuencia con la que practicas sexo, la cantidad de publicaciones en redes es inversamente proporcional a la salud de la relación. Al menos, eso asegura un estudio publicado en Personality and Social Media Bulletin.

Según los líderes de la investigación, cuanto más publica uno de los miembros de la pareja, más inseguro está de los sentimientos de la otra persona hacia él, y concluyeron que Facebook es, en realidad, uno de los peores canales para conocer cuál es la verdadera situación de una relación. Así es: el postureo llegó al amor.

Pero no sólo este estudio confirma que las parejas realmente felices son las que menos ruido hacen en las redes sociales. Hay otros condicionantes que lo confirman:

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LAS PERSONAS FELICES NO NECESITAN EXHIBIR SU VIDA

“Aquellos cuya autoestima depende de su relación amorosa [algo que los expertos llaman Relación Contingente de Autoestima] sienten la necesidad de mostrar a otros, a sus parejas y tal vez a ellos mismos que su relación está bien y que, por lo tanto, ellos también están bien», explicaba la profesora Gwendolyn Seidman de Albright College .

La analista cultural Sherry Turkle habla de la necesidad de algunos de aderezar su imagen pública. «Nos estamos acostumbrando a una nueva forma de sentirnos solos en comunidad. Queremos estar con los demás, pero también conectados con todos los otros sitios en los que queremos estar. Costumizamos (Personalizar algo realizando modificaciones que reflejen los gustos y preferencias de la persona) nuestra vida. Y lo hacemos porque lo realmente importante es controlar dónde focalizamos nuestra atención», explica .

Las personas felices, igual que las parejas felices, no necesitan demostrar nada a nadie, mientras que aquellas que no tienen esa seguridad, necesitan reafirmarlo en el plano 3.0.

LAS PERSONAS FELICES NO PHUBBEAN

Uno de los neologismos que nos enseñó 2015 fue phubbing (Ignorar a una persona por prestar atención al teléfono celular). El verbo nació, más que por la acción en sí, por los efectos secundarios que causaba en las parejas. Lo cierto es que si una persona te satisface a nivel emocional es poco probable que en medio de una conversación te detengas a poner a prueba su perfil de Instagram.

SOBRE EL CONFLICTO FACEBOOK

Las redes son para algunos una suerte de foro, de terapia. El amigo al que dejaste de seguir no es un caso aislado: los estudios confirman que la comunidad virtual ayuda a combatir los sentimientos de soledad. Sin embargo, las plataformas sobrevive a diario con millones de usuarios que prescinden de compartir citas célebres y canciones con doble sentido. ¿Existen personas sin problemas? ¿Parejas sin problemas? La respuesta es no; sólo que algunos no los hacen públicos. “Internet ha cambiado nuestra forma de relacionarnos; no sólo con los demás, también con nosotros mismos. Ha cambiado nuestra capacidad de autorreflexión”, explicaba Sherry Turkle.

Las redes ahora lastiman las relaciones sentimentales.

Y en ocasiones eso también tiene consecuencias. Los expertos ya hablan del conflicto Facebook, y es que se ha demostrado que la diferencia de actividad en Internet entre los dos miembros puede ser fuente de problemas en la pareja.

EL AMOR SE VIVE, NO SE COMPARTE

Aunque Internet se haya convertido en una suerte de escaparate, las imágenes que se proyectan siempre están sesgadas. “Las redes sociales ofrecen un buen campo de cultivo para dos características humanas muy extendidas: el alardear de lo que se tiene y el husmear en la vida de los demás”, apuntaba el Doctor Héctor Galván.

Aunque la RAE admitió la palabra postureo (Actitud artificiosa e impostada que se adopta por conveniencia o presunción) ya en 2013, seguimos pensando que las parejas que más fotos comparten son las que viajan más, las que salen a cenar más, o las que van más a fiestas y las que se quieren y aman más. Sin embargo, mientras algunos pierden el tiempo en retratar sus vivencias lo que consiguen es no disfrutarlas.

¿POR QUÉ HAY GENTE QUE PONE COSAS DE SU PAREJA EN REDES Y OTRA NO?

El mundo se divide en dos tipos de personas: las que suben fotos continuamente a sus redes sociales y las que no lo hacen nunca, ¿qué las diferencia?

Es un hecho incontestable que, desde que las redes sociales aparecieron en nuestras vidas, las relaciones se han vuelto un poco más complicadas, especialmente las de pareja. Parece mucho más fácil que los celos o los sentimientos posesivos despierten cuando tu pareja se niega a darte su contraseña (¿me estará escondiendo algo?), se ha quitado la hora de conexión o subió ayer una ‘storie’ a Instagram, pero no contestó a tu WhatsApp.

Son problemas del primer mundo, quizá, pero muchas personas acaban verdaderamente obsesionadas con esos pequeños detalles. El mundo se divide en dos tipos de personas: las que suben fotos continuamente a sus redes sociales y las que no lo hacen nunca. Con las parejas pueden surgir fricciones: quizá uno tiende a compartir su vida en la red mientras que el otro es más introvertido.

Algunas personas opinan que, si su pareja no quiere poner en redes sociales ninguna información sobre su relación es porque tienen algo que ocultar o quieren seguir fingiendo que son solteros.

Un estudio de 2019 a conjunto entre la Universidad Carnegie Mellon y la Universidad de Kansas llegó a la conclusión de que publicar la sentimientos que tienes con tu pareja en redes sociales con frecuencia puede tener un efecto negativo en las relaciones.

Por otro lado, una encuesta a 2 mil británicos descubrió que aquellos que nunca publicaban sobre su pareja tenían más probabilidades de admitir estar ‘muy felices’ en su relación, en comparación con las que publicaban un par de veces al año, una vez a la semana o tres veces a la semana. Hay muchos datos que sugieren que no es oro todo lo que reluce y que una relación que se muestra demasiado en redes sociales podría no ser tan feliz.

Otro estudio realizado, llegó a la conclusión de que las parejas con menos seguridad en su relación tendían a ser las que más publicaban. No es nada raro, pues muchas investigaciones ya han ahondado en aquello de la inseguridad que causan las redes.

Pero hay una dicotomía: algunas personas opinan que, si su pareja no quiere poner en redes sociales ninguna información sobre su relación es porque tienen algo que ocultar o quieren seguir fingiendo que son solteros. ¿Por qué hay gente que decide compartir su vida en redes sociales en primera instancia?

Cuando subes una foto con tu pareja estás marcando el terreno y mostrando a posibles rivales románticos que tú eres el elegido y le estás dando a tu pareja la misma oportunidad, al mostrar su relación en línea también le indicas a posibles rivales románticos que está fuera del mercado.

Por otro lado, las personas que deciden que su relación solo les pertenece a ellos parecen elegir disfrutar completamente del tiempo que pasan con su pareja y aprovechar al máximo la experiencia sin tener que demostrar nada a nadie más que al otro.

Según muchos expertos, esa es la clave para estar más satisfechos consigo mismos: se debe buscar la validación en uno mismo y la pareja y no a través de las redes sociales.

Otra encuesta demostró que se puede predecir el grado de psicopatía y narcisismo de una persona en relación con los selfies que publica en redes.

Los expertos afirman, además, que las personas que publican con más frecuencia no solo son más inseguras, sino que también, según una encuesta realizada con 800 hombres de entre 18 y 40 años, se podía predecir el grado de psicopatía y narcisismo de una persona en relación con los selfies que publicaba en redes.

Las conclusiones en general parecen indicar que las personas que se mantienen alejadas de las redes sociales son más felices, pero a la hora de la verdad, por supuesto y más allá de los estudios, importa verdaderamente lo que tú sientas y la manera en que quieras expresarlo.

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