Cuando ya lo daba por perdido, la casualidad le iba a dar una grata sorpresa.
Por: Agencias | criticadn.mx
Aisha Nieves se había rendido en su búsqueda de Kovu. Este perro se había extraviado de forma inexplicable y su dueña lo buscó sin parar durante bastante tiempo.
Afiches, búsquedas, visitas a refugios en su ciudad Allentown, Pennsylvania, Estados Unidos, no fueron suficientes para encontrar al amigo canino. Los sentimientos eran muchos y la sensación de que Kovu había tenido un mal destino eran recurrentes.
Cuando por fin se decidió a seguir con su vida y aceptar que había que dar el siguiente paso, decidió adoptar a otra mascota. Para eso fue revisando el sitio de internet Lehigh County Humane Society donde había encontrado a Kovu la primera vez.
En su búsqueda logró observar unos ojos café que le parecían familiares, pero que no le aportaban seguridad. Ante la incertidumbre decidió ir al centro donde se encontraban los caninos.
Al llegar al refugio, Kovu la reconoció inmediatamente y empezó a buscarla y mover la cola sin parar. ¡Qué increíble! Después de 24 meses aún la esperaba.
PublicidadAisha comenta: “Al ver la publicación por Internet pensé: Espera, no puede ser él. Entonces, vi la pequeña marca sobre un ojo, la marca de cuando se quedó atascado en una verja, y pensé: ¡Dios mío, es mi bebé, es Kovu!”. Se abrazaron con alegría y brotaron lágrimas de sus ojos al encontrarse después de una larga espera.
“Lo quiero tanto, así que estoy muy feliz de que haya vuelto”, dijo Nieves.
Semejante historia representa una realidad que no debe perder la humanidad y es la falta de esperanza. Hubiese sido lo más fácil olvidarse de este amigo canino, pero experiencias como estas dejan la sensación de que nada se debe dejar como capítulo cerrado.
Este contenido esta protegido por los derechos de autor y de propiedad intelectual. Se prohibe la copia, transmisión o redistribución del mismo sin autorización por escrito de Crítica Digital Noticias. Todos los derechos reservados. Copyright 2024.