Otra mujer que mendiga  justicia en la Fiscalía Nayarita 

Por: Lenin Guardado | criticadn.mx

Hoy se da cuenta de un caso más de la indolencia que transpiran algunos titulares de las diversas “mesas especializadas” que existen en una de las instituciones que tiene una de las más bajas calificaciones de eficiencia y confianza entre la población: La Fiscalía General de Nayarit.

Con justa razón se han ganado esa mala percepción de la ciudadanía, porque, a pesar de los esfuerzos que ha llevado a cabo el Fiscal General, Petronilo Díaz Ponce Medrano, para limpiar esa dependencia procuradora de justicia, la negligencia, la desatención o pereza de un porcentaje bajo de los servidores públicos que ahí laboran, echan a perder todo lo bueno que ahí sí se hace.

Sí, porque hay que reconocer que la gran mayoría de los que trabajan en la Fiscalía Nayarita es gente capaz, profesional, comprometida con su responsabilidad y, es personal, que intenta dejar huella con su labor desde la trinchera en la que se desenvuelven.

Pero, por desgracia, el mal actuar, la gandulería, o inacción del algunos dizque servidores públicos, echan a la basura en muy poco tiempo lo bueno que con mucho sacrificio y trabajo honesto se ha realizado a lo largo de los últimos 7 años.

MÁS DE UN AÑO ESPERANDO QUE SE ACTÚE

Para muestra de la poltronería que se da en algunas áreas de investigación, está el caso de quien llamaremos solamente Yareli, dama que desde hace casi un año interpuso una querella en contra de quien entonces era su marido, un tipejo de nombre Jorge Alberto Arellano Maldonado, y es que, en uno de sus tantos momentos de “hombría”, todo ebrio y bajo sustancias tóxicas, golpeó salvajemente a quien era su pareja.

La golpiza que le propinó a la madre de su hijo fue tal, que hasta la mandó a recibir atención médica. Después de eso, y tras las amenazas de muerte y de “cuando menos” volverle a poner otra tranquiza igual o peor, hizo que la dama no procediera, en esa ocasión, legalmente. Sometida, ella volvió al que consideraba “su hogar”. 

Pasaron los días, y contrario a la esperanza que ella tenía de que su marido recapacitaría y mejorara, todo fue de mal a peor. La relación con el padre de su hijo menor no cambió, de hecho, se volvió más violenta e insoportable, tanto que en una nueva discusión (derivada del reclamo de la mujer porque el marido llegó ebrio y drogado al hogar), motivó a que éste de nueva cuenta la dejara como “Santo Cristo”. 

Ella volvió a recibir atención médica, pero esa vez, con el respaldo de amigas y familia, Yareli se llenó de valor y fue a denunciarlo por lesiones, amenazas, injurias, violencia intrafamiliar y lo que resultara. Ahora sí puso su querella en la Fiscalía de Nayarit tal y como seguido se le pide a la población que se haga.

Ahí en el módulo de atención temprana, le dijeron que pronto le hablarían, que sí procederían, que integrarían la carpeta de investigación (con todas las pruebas habidas y por haber), y que sí se procedería en contra de quien debería de ser el protector de la familia y no el violentador número 1.

Pero pasaron los días, semanas, meses y nada….

La dama seguía soportando los malos tratos, gritos, violaciones de todo tipo y de nuevo golpes.

Hasta que el pasado mes de diciembre la muchacha se armó de valor, y junto a su pequeño hijo, optó por abandonar al esposo. Sí, harta de esa vida, lo dejó, y se fue a vivir con unos familiares.

Ya tratando de salir sola en la vida, ella puso un negocio de venta de ropa por internet, con lo que comenzó a tener algo de ingresos, que le permitieron ir solventando los gastos del día, y después, pudo rentar una casita en el fraccionamiento Senderos del Monte en Tepic.

Todo caminaba bien en su nueva etapa, su nueva vida sin el marido golpeador, tenía una entradita de recursos humilde y con su hijo a un lado en un ambiente de tranquilidad.

LA VIOLENCIA ESCALÓ AL SEMÁFORO ROJO DEL VIOLENTÓMETRO  

El gusto no le duró mucho, pues el ex de Yareli se dio cuenta que, efectivamente, su ex esposa ya no lo ocupaba para nada y que, al contrario, le estaba yendo mejor sola a ella y a su hijo, así que Jorge Alberto Arellano Maldonado optó por aumentar sus ataques y sacar de otra forma su coraje pues lo habían “humillado”.

El locuaz y drogadicto de Arellano Maldonado para sacar su frustración de “macho inservible y desechable”, comenzó más continuamente a amenazar de muerte a su ex, con la intención, se cree, de que volvieran a estar juntos, quería someterla como lo hizo meses atrás, y obligarla a que volviera con él.

El tipejo todo borracho, drogado y sabrá dios en qué otro mal estado lo hacía, la buscaba en todos lados, hasta dejó de trabajar para ir a buscarla e intimidarla, pero no conseguía “convencerla” de que volvieran.

Así que el pasado 24 de enero, el tipejo basura de Jorge Alberto Arellano Maldonado, supo dónde vivía su ex, fue a buscarla, tocó y tocó, gritó, hizo un escándalo que llamó la atención de los vecinos, y como no le abrían (porque gracias a Dios esa noche Yareli y el niño durmieron con sus padres), el agresor -cuentan vecinos- muy enojado, quebró una ventana de la casa ubicada en la calle Sendero Providencia, del fraccionamiento Senderos del Monte, luego echó gasolina, y finalmente le prendió fuego.

Su intención era clara: matar a su ex mujer que lo había abandonado, ¡pero también a su pequeñito hijo!

Una vez que el fuego comenzó a crecer, el piromaníaco salió corriendo con rumbo desconocido.

Los vecinos llamaron a emergencias, y en pocos minutos llegaron bomberos quienes extinguieron las llamas y así evitaron que el fuego pasara a otras viviendas, pero, lamentablemente, los pocos bienes de Yareli y su hijo, no se salvaron. Todo quedó reducido a cenizas.

INTERPONE OTRA QUERELLA Y DENUNCIA… ¡Y NO PASA NADA!

Obviamente, como ya la había amenazado con hacerle daño, más algunas señas y datos que dieron los vecinos, se supo rápidamente que era su exmarido el que había provocado el siniestro, así que puso una nueva denuncia contra él, por el incendio y una querella por las constantes amenazas de muerte. 

En la Fiscalía nuevamente le recibieron su querella ahí en Atención Temprana, pero clasificaron los delitos “normales”, ni una de esas acciones como “feminicidio en grado de tentativa” (expediente NAY/TEP/III/RH/01348/2025).

Así que pasaron de nuevo los días, semanas y un mes, y de nuevo el agresor “volvió a la carga”.

Confiado y envalentonado porque “no le hacen nada y todos se la pelan” -como él dice a los cuatro vientos- Jorge Alberto Arellano Maldonado, nuevamente, comienza a amenazar a la madre de su hijo, y ahora, también inició a distribuir imágenes íntimas que tenía de ella, diciéndole que si no regresaba con él, seguiría “quemándola” de esa manera para que todo mundo la viera así.

SE PONE UNA TERCER QUERELLA… ¡Y SIGUE SIN PASAR NADA!

Ante ese actuar, ya desesperada, sin saber qué más hacer para detener a su agresor, Yareli vuelve a acudir a la autoridad, interpone una nueva querella el 27 de enero pasado y pide una orden de restricción contra su violentador Jorge Alberto, (expediente NAY/TEP/III/RH/01528/2025), pero, al parecer, todo sigue congelado.

LA JOVEN NO HAYA QUE HACER…

En las mesas especializadas donde se llevan a cabo la integración de las carpetas de investigación, nadie ha sido capaz de juntar los tres expedientes por ser asuntos relacionados, y darle una verdadera atención a la víctima, por ello ayer la muchacha toda desesperada hizo una publicación en la red social Facebook con imágenes de su ex esposo, quien, dicho sea de paso, tampoco le da pensión por la manutención de su hijo.

Esto dice el grito de auxilio que hizo público la muchacha:

“Como ya muchos saben de  este tipo, hoy mi ex pareja, hace algunos dias incendió por completo la casa en donde yo vivía con mi hijo, como ha publicado y pasado fotografías mías a amigos de él y familiares de él entre y otras cosas, (a tal grado de) llegar de renunciar a su trabajo para dejar de mantener a su único hijo,   cuando en redes se da el lujo de decir que le da todo, (…) cuando no lo hace, y que a pesar de todo lo que a hecho sigue molestando a mis familiares para que yo regrese con él, hasta enterarme que quiere dejar pasar dias para hacerme algo, (por ello) lo vuelvo hacer público y responsable si algo me llega a pasar a Jorge Alberto Arellano Maldonado.”

En los comentarios una de sus amigas le dice que lo de la quema de la casa fue algo atroz y grave, que lo denuncie a la Fiscalía (obviamente sin conocer la historia aquí contada), y Yareli le contestó: “ya lo hice pero, la Fiscalía, bien gracias”. 

¿QUÉ ESPERAN PARA ACTUAR?

Siempre se ha dicho en foros y eventos que es mucho mejor que la autoridad exagere al tratar de prevenir un delito y más un feminicidio.

Pero, este caso es claro que está en el desinterés de los responsables de las investigaciones.

Es, por tanto, que antes de que suceda una tragedia, se le hace un atento y respetuoso llamado al Fiscal General, Petronilo Díaz Ponce Medrano, para que ponga orden en este sentido, y dé una nueva “cernida” en la institución para sacar a esos malos y malas Agentes de Ministerio Público que parece están a fuerzas ahí, porque su labor los delata ya que dejan mucho a desear.

El apoyo a las mujeres no solo se da en un discurso en el marco del 8M, que se conmemora el Día Internacional de la Mujer, sino que es haciendo valer sus derechos, y unos de ellos son los de vivir sin violencia, en paz y tranquilidad, y el de contar con una justicia pronta y expedita.

PARA CERRAR

No solo los Agentes de Ministerio Público que atienden los asuntos de violencia de género o familiares son insensibles. Los de Delitos Patrimoniales también. Ahí le hacen «al tío lolo», pronto daré detalles de cómo ahí protegen al sinvergüenza, criminal y fraudeador de Carlos Betancourt Rodríguez, delincuente que colecciona querellas y denuncias por fraude y fraccionamiento ilegal de inmuebles, pero el compa sigue libre, ¿Quién lo protege ó a quién se atiene?

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