Según la misma Cámara de Diputados Federal, la joven nayarita en casi tres años no subió ni una sola vez a la tribuna, ni propuso alguna iniciativa de ley, es decir, no habló en ninguna ocasión a favor de los sus representados, los tepicenses. Eso sí, cobró mensualmente casi 200 mil pesos en ese mismo tiempo.
Por: Armando G. Barrera/Crítica dn
Resulta incongruente que la joven nayarita, vecina del poblado de Pantanal, municipio de Xalisco, ahora quiera ser la candidata a la Presidencia Municipal de Tepic, debido a que, en su encargo como legisladora federal y como representante de los tepicenses, en ninguna ocasión subió a la máxima tribuna del país.
En efecto, la muchachita de las pasarelas, que piensa que con solo tomarse fotos en bikini y tener un bonito rostro va a resolver los problemas que aquejan a los tepicenses, en ningún momento se dignó a subir a la tribuna de San Lázaro para exponer un solo problema de los habitantes de la capital nayarita.
Así se ha colocado como la legisladora con menos participación en el congreso federal, y se cree que es debido a su falta de intelecto y su nula vocación para proponer iniciativas de ley que en verdad hubieran beneficiado a los tepicenses o los nayaritas en general, como el de obtener una tarifa especial por parte de la Comisión Federal de Electricidad que aquí en la entidad tiene 4 presas generadoras de energía eléctrica.
En efecto, la diputada de las pasarelas está en primer lugar de menos participaciones, con un total de cero. Le sigue el hijo del excandidato a presidente de la república, Luis Donaldo Colosio, de Movimiento Ciudadano, que al igual que María Geraldine Ponce Méndez, no propuso iniciativa de reforma alguna. Pero, Colosio junior, al menos tuvo una participación en la tribuna.
Geraldine Ponce, de quien se dice es solo un títere del exdiputado multipartidista Alejandro Galván Araiza, en redes sociales “gestionó”, según ella, mil millones de pesos para beneficios de los habitantes de la capital cora, sin embargo, el dinero nunca llegó, lo que se traduce como una burla para los electores y sus representados.
Una cosa si hay que recalcar de esta joven legisladora morenista, que cada mes religiosamente cobraba sus quincenas, algo así como 200 mil pesos mensuales, a parte de los boletos de avión gratuitos, y de todo lo que le daban a sus «asesores» como Galván Araiza, que cobraba también muy bien en la Cámara de Diputados.
Este contenido esta protegido por los derechos de autor y de propiedad intelectual. Se prohibe la copia, transmisión o redistribución del mismo sin autorización por escrito de Crítica Digital Noticias. Todos los derechos reservados. Copyright 2024.