Sicarios sorprendieron a un convoy en Chinicuila, Michoacán. (IMÁGENES EXPLÍCITAS)
Por: Agencias/Críticadn
En una carretera rural de Chinicuila en el estado de Michoacán, una zona marcada por un atraso secular, elementos de la Guardia Nacional fueron emboscados por supuestos miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación.
Los elementos circulaban por el sitio abordo de dos camionetas de la Marina y Guardia Nacional. En el trayecto, al menos 10 vehículos de los sicarios ya los esperaban para atacarlos. Al detectar las unidades de los representantes de la ley, los criminales abrieron fuego en su contra con rifles de asalto y fusiles Barret calibre .50.
Debieron abrir fuego y escapar
Ante la situación, los efectivos descendieron de sus unidades y se colocaron en la parte trasera para resguardarse. Según atestigua un video grabado por los propios uniformados, éstos nunca dejaron de contestar los disparos de los gatilleros.
Cuatro guardias resultaron heridos; sin embargo, dos de ellos perdieron la vida en el lugar. Finalmente, los efectivos consiguieron replegar a los sicarios.
En el evento fallecieron los oficiales César David «R» y Néstor Daniel «S», mientras que los uniformados Sheila Berenice «G» y Flavio Óscar «G» resultaron heridos.
También fueron abatidos algunos de los sicarios, entre ellos presuntamente Nazario Cázares, alias “El Sello Rojo”, supuesto lugarteniente del CJNG en la región.
“El Sello Rojo” es oriundo del poblado La Nuez del municipio de Chinicuila. Se presume que antes de unirse a las filas del CJNG perteneció a los autodefensas de la Sierra-Costa.
Cuando la policía comunitaria a la que pertenecía se desintegró, el sujeto se unió a la organización criminal y huyó hasta Colima. De acuerdo con investigaciones del área de inteligencia, “El Sello Rojo” pertenecía al Grupo Élite de Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”.
De momento las autoridades no han detallado el momento del ataque, aunque el sitio es conocido por los violentos pleitos entre cárteles y elementos de las fuerzas armadas, que desde hace años enfrentan las comunidades.
Las fuerzas de seguridad, tanto federales como locales, son blancos frecuentes del crimen organizado. Michoacán, mercado del cultivo millonario del aguacate, es uno de los frentes del combate contra la violencia. La entidad es un territorio en disputa entre los grupos de autodefensa y el poderoso Cártel Jalisco Nueva Generación, que ha sido señalado por las autoridades como responsable de varios ataques a policías y elementos de la Guardia Nacional.
El 14 de octubre de 2019, al menos 13 policías murieron y otros nueve resultaron heridos, tras ser emboscados por un grupo de civiles armados. Los agentes se encontraban patrullado en el municipio de Aguililla.
Las patrullas salieron por la mañana para dar cumplimiento a un mandato judicial de acompañar a una madre y a su hija a hacer una diligencia en Morelia, la capital de Michoacán. En el trayecto fueron atacados por un grupo de más de 30 personas en posesión de armas de grueso calibre a bordo de cinco vehículos blindados. En un video se observó a varios vehículos policiales en llamas junto a la carretera.
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