Campa me dijo que Mariano es un artista huichol reconocido hasta internacionalmente. Deberías entrevistarlo. Órale, jálatelo para acá....
Por: Oscar González Bonilla | criticadn.mx
Como de costumbre llegué al café Diligencias, y al ir a recoger periódico que cotidianamente acostumbro leer, advertí la presencia de un grupo como de cinco huicholes ataviado con su original vestimenta multicolor.
Uno de ellos joven maniobraba una computadora lap top, razón de su estancia en ese lugar pues el negocio cuenta con servicio inalámbrico de internet. Sin más me dispuse a la lectura, colocado de espalda a los indígenas en mesa contigua.
En eso estaba cuando a mí llegó el vate Octavio Campa Bonilla para preguntar ¿Es Mariano? No sé. Yo no lo conocía. Entonces se dirigió a él: Sí, es Mariano. Se saludaron. Fue el momento en que Campa me dijo que Mariano es un artista huichol reconocido hasta internacionalmente. Deberías entrevistarlo. Órale, jálatelo para acá.
JALISCIENSE, PERO SE SIENTE NAYARITA
Mariano accedió con una humildad franciscana, de momento me sorprendió la sencillez como se conduce aquel hombre. Durante el desarrollo de la charla me enteré que tiene una vasta experiencia en estas lides, nada lo alteró.
Mariano Valadez Navarro nació en la comunidad de Santa Catarina, Jalisco, pero a los siete años de edad fue llevado a Botadero, municipio de Santiago Ixcuintla, pues a esa corta edad comenzó a trabajar en labores del campo por falta de padres. Considera que en ese lugar fue su crianza.
Mariano realiza artísticamente cuadros de estambre, pero muy al margen de la ordinariez, plagados de sincretismo huichol y por tanto muy apreciados nacional e internacionalmente, sobre todo en los Estados Unidos de Norteamérica.
Inicio ese quehacer en 1972, y desde el gobierno de Rogelio Flores Curiel (1976-1981) ha sido invitado a participar con la exposición de su arte en diferentes muestras turísticas y culturales que organiza la oficialidad dentro y fuera de Nayarit y México. “He viajado mucho al extranjero”.
APEGO A LA TRADICIÓN CULTURAL
Para llegar a realizar arte en los cuadros de estambre, Mariano tuvo que mamar la cultura huichol y para lograrlo estuvo muy constante en contacto con la comunidad de sus hermanos indígenas. Aprendió al participar en las ceremonias y escuchar conversaciones de sus mayores.
Dice que es común en su obra la utilización de símbolos de dioses, como es el venado mágico a través del cual los wirrarikas (huicholes) han aprendido a guiarse hacia la magia del canto. “Entonces, a través de esos cantos he aprendido, porque me los grabo. Luego hago la pintura, y así es como me expreso”.
Mariano considera fundamental el conocimiento de la cultura huichol, porque a través de ella se está en condiciones de elaborar los cuadros de estambre, collares, pulseras y adornar jícaras con chaquira. “Todas las figuras que se pintan ahí es pura cosa espiritual de los dioses huicholes”.
“Antes de empezar un trabajo tengo que pensar que línea voy a presentar ahí. Porque cada cosa tiene su línea: el sol, el aire, el mar. Entonces uno se concentra, y te sale el cuadro”.
HA VIVIDO MUY BIEN DEL ARTE
El artista tiene tan sólo estudios hasta tercer año de primaria. “Yo sufrí mucho, por eso no fui a la escuela, porque no tenía mis papás, vine a la costa a trabajar en el campo y ahí me quedé. Pero la vida me ha tratado muy bien, a través de mi arte he vivido bien, no me hace falta nada. Y así sigo adelante”.
Mariano Valadez Navarro actualmente radica en Santiago Ixcuintla, donde dice que su casa funciona como museo. Allí es feliz porque además su arte ha sido reconocido por el pueblo santiaguense, amén de recibir cantidad de felicitaciones. Manifiesta que apoya mucho a los estudiantes por medio de su trabajo.
Le mencioné que la creación del trabajo artístico creí lo había adquirido de sus padres, pero no fue así. “Ahora mi hijo sigue los mismos pasos que yo (y apuntó al joven que manejaba la computadora portátil, que se llama Cilau Valadez), me da mucho gusto, porque él sí ha aprendido de mí”.
UNA GRINGA LO PROYECTÓ MUNDIALMENTE
No recibe apoyo de gobierno alguno para la realización de obra. Más bien se sostiene con la venta de sus trabajos, pinturas les dice él. Es en este punto cuando expresa que se casó con una mujer de nacionalidad estadunidense, misma que a Mariano le forjó personalidad y fama mediante la edición de siete libros que hablan de su obra y su persona, que se ha vendido muy bien. Hoy se encuentran separados.
Dijo que la primera exposición de sus cuadros la hizo en el Museo Folklórico de San Francisco, California, y que enseguida esa misma recorrió San Antonio, Dallas y Nueva York. De esa manera ha peregrinado por buena parte del territorio estadunidense y Europa, de donde ha cosechado más de doce reconocimientos.
– ¿Se siente nayarita o jalisciense?
-Me siento nayarita, porque estoy en Nayarit. Todo el tiempo he representado a Nayarit en el extranjero, como si fuera mi estado. Aunque alguna persona me dice que soy un charlatán, pero yo hablo el dialecto, vivo en el pueblo, pero sigo conservando mi cultura y mi ciencia. Hablo el dialecto, si no lo hablara, entonces sí.
En esos momentos el grupo hacía preparativos para el viaje a tierra sagrada, a Wiricuta, en Real de Catorce, San Luis Potosí. A donde calcularon asistirían indígenas que cupieran en 60 autobuses. Van a defender lo que consideran les pertenece, ya que el gobierno federal ha permitido la explotación allí de minerales a una empresa canadiense. Mariano manifiesta que se pretende acabar con el territorio sagrado, muy a pesar que Wirikuta fue incluido desde 1988 en la lista de sitios sagrados naturales por la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura).
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Esta información también se publicó en la edición impresa de la Revista Crítica #2662 (Junio 2023), que tiene un tiraje de 5,000 ejemplares, distribuidos de manera gratuita en lugares estratégicos de 17 municipios de Nayarit y en Puerto Vallarta, Jalisco
