México estará a partir de la siguiente semana con la mitad de los estados en rojo y la otra mitad en naranja.
Por: Agencias/Críticadn
Con 46 mil 688 muertos y 424 mil 637 casos acumulados desde el 27 de febrero, México estará a partir de la siguiente semana con la mitad de los estados en rojo y la otra mitad en naranja, de acuerdo con la actualización presentada ayer por el subsecretario de Salud Hugo López-Gatell.
Baja California Sur, Durango, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí, Zacatecas, Nayarit, Jalisco, Michoacán, Colima, Hidalgo, Puebla, Veracruz, Tabasco y Yucatán son los estados que deberán seguir con las restricciones propias del semáforo rojo.
Baja California, Sonora, Chihuahua, Sinaloa, Aguascalientes, Querétaro, Guanajuato, Estado de México, Ciudad de México, Morelos, Guerrero, Tlaxcala, Oaxaca, Chiapas, Campeche, Quintana Roo, los estados en naranja.
En cuanto al número de muertos por covid-19, México superó a Reino Unido, pasando así a ocupar el tercer lugar en el conteo, según la Universidad Johns Hopkins, sólo detrás de Estados Unidos (153,314 muertes) y Brasil (92,475 decesos).
“Entendemos las dificultades que enfrentan”
Sobre la carta en la que gobernadores identificados como Alianza Federalista piden la renuncia del subsecretario López-Gatell, éste respondió: “Es natural que todos, y estoy seguro que estos nueve gobernadores tienen distintos sentimientos y percepciones que pueden causar frustración, preocupación, enojo ante la realidad. Las decisiones específicas de ellos involucran el éxito o el no éxito del manejo de la epidemia, porque ellos son autoridades sanitarias, de acuerdo con la Ley General de Salud. Es natural que eso implique una carga y les expreso mis respetos, como lo he hecho en múltiples ocasiones”.
Antes, explicó que sólo se trató, en realidad, de nueve gobernadores y no de 10, como en un inicio se había dicho, pues el propio subsecretario dio a conocer el deslinde de la misiva que el gobernador de Chihuahua Javier Corral hizo a través de su cuenta de Twitter.
Por otra parte, mencionó que los gobernadores tienen tareas administrativas y políticas, por lo que sus decisiones involucran el deber de cuidar la economía y sociedad de los estados, lo que “puede causar un gran estrés. No hay una fórmula única para resolverlo y en cada entidad se van resolviendo de acuerdo a las decisiones”.
Finalmente, espera que todos, gobierno federal y estatales, puedan seguir colaborando.
“De entrada, una carta que involucra el nombre y el prestigio de un gobernador, en este caso, además un gobernador ejemplar, competente, que ha tomado una postura de enorme responsabilidad en términos de la conducción técnica de la pandemia de covid en Chihuahua, me parece que es ya, de entrada, un elemento indicativo del carácter de esta proclama de los 10 gobernadores”, dijo el funcionario, quien en ningún momento mencionó la posibilidad de renunciar.
En torno al semáforo epidemiológico aseguró que la relación con los gobernadores ha sido constructiva y negó una vez más que haya problemas con ellos.
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