Aquí publicamos una de las tantas historias de promesas que hizo y no cumplió este sinvergüenza candidato que se vale del partido Morena para volver a engañar al pueblo de SAMAO, cuando en los puestos que ha estado nunca hizo nada por su gente.
Por: Armando G. Barrera | criticadn.mx
Era un 27 de enero del 2020, cuando en medio de una multitud del pueblo de Zapotanito, en Santa María del Oro, la hermosa Oyuki, conocida como «La Reina del Jaripeo«, tomaba el micrófono para hacer una petición al público.
Esto fue en el marco las famosísimas fiestas de la localidad de Zapotanito, y ahí, Oyuki le pedía al público que se organizarán, que cooperaran con lo que pudieran para poner la techumbre del corral de toros, y así poder tener eventos hasta en tiempo de lluvias, y cuando no lloviera, para que se cubrieran del sol.
Había poco más de 2 mil gentes en aquel evento. Y al escuchar la propuesta, todos aplaudieron la iniciativa que tuvo aquella conocida artista nayarita.
Así, los presentes se comenzaron a sumar, iban al centro del ruedo, tomaban el micrófono, se presentaban y manifestaban su apoyo…
«Buenas tardes a todos, yo soy Juan y estoy de acuerdo con lo que propone Oyuki y yo pongo 5 láminas»... otro ponía 3, otro mano de obra, otro dinero… y así se iban sumando los presentes a lo que era una excelente idea.
De pronto… en entre la multitud, llega el médico Rodrigo Polanco, quien pretendía desde entonces ser diputado local, por Morena. Él andaba bien fajado (para tapar la panzona de yegua enquelitada que tiene) y se presentó bien puesto a sumarse. Entonces tomó el micrófono y dijo:
«𝐁𝐮𝐞𝐧𝐚𝐬 𝐭𝐚𝐫𝐝𝐞𝐬 𝐚 𝐭𝐨𝐝𝐨𝐬 𝐮𝐬𝐭𝐞𝐝𝐞𝐬… 𝐘𝐨 𝐬𝐨𝐲 𝐑𝐨𝐝𝐫𝐢𝐠𝐨 𝐏𝐨𝐥𝐚𝐧𝐜𝐨 𝐲 𝐦𝐞 𝐜𝐨𝐦𝐩𝐫𝐨𝐦𝐞𝐭𝐨 𝐚𝐧𝐭𝐞 𝐭𝐨𝐝𝐨𝐬 𝐮𝐬𝐭𝐞𝐝𝐞𝐬 𝐚 𝐩𝐨𝐧𝐞𝐫 𝐥𝐚 𝐭𝐞𝐜𝐡𝐮𝐦𝐛𝐫𝐞 𝐝𝐞𝐥 𝐜𝐨𝐫𝐫𝐚𝐥 𝐝𝐞 𝐭𝐨𝐫𝐨𝐬… 𝐲 𝐬𝐢 𝐧𝐨 𝐥𝐨 𝐡𝐚𝐠𝐨… 𝐦𝐞 𝐯𝐨𝐲 𝐝𝐞𝐥 𝐩𝐮𝐞𝐛𝐥𝐨».
La multitud sorprendida y contenta le aplaudió por varios minutos, iban y lo saludaban, le agradecían, y lo veían como quien en realidad les haría caso en esa petición que ya habían hecho a varios políticos y que nadie les respondido.
Así pues, el médico Rodrigo Polanco se cuadraba ante tanto aplauso y tanta algarabía. Se pavoneaba. Se paraba firme, sumía la panza de Yegua enquelitada y sacaba el pecho con mucho orgullo.
Y lo que dijo ese día como reguero de pólvora se corrió por todo SAMAO. Luego fue candidato por Morena a diputado, y el pueblo le dio su confianza. Votó por él.
Ahora ya es 2024 y el ahora flamante diputado de Morena y candidato a Presidente Municipal ni una pinche lámina de cartón ha llevado al corral de toros. Ah, pero dice que llegando a la alcaldía será lo primero que hará, porque los casi 4 millones de pesos que cobró como diputado no le alcanzaban y porque no tuvo tampoco tiempo de gestionar esa obra.
Hoy anda en campaña de nuevo. ¿Tú sí le crees?, ¿Le darás tu voto a esta escoria de la política?.
El pueblo no olvida.
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